Sobre mí
De la pedagogía a la Osteopatía

Mi recorrido profesional ha estado siempre guiado por un profundo interés hacia el ser humano y sus procesos vitales.
Mientras estudiaba Pedagogía, inicié una formación en Psicoterapia Gestalt, desde donde pude profundizar hacia una mirada integradora del ser humano. Fue el inicio de un largo camino desde el que ir poniendo comprensión en mi propio mundo emocional. Esto me permitió acompañar a niños y grupos de madres y padres, facilitando espacios donde la escucha, el vínculo, la conciencia emocional y la conexión con el mundo interno, tenían un papel central.
Más adelante, como Educadora Social trabajé con niños y jóvenes en riesgo de exclusión social, acompañándolos en su proceso de integración.
Fascinada por el vínculo entre el cuerpo, la mente y las emociones, mi camino se fue orientando hacia el trabajo corporal como vía de transformación. Me formé como osteópata, especializándome en Osteopatía Tisular y biodinámica, dos aproximaciones que entienden el cuerpo como una unidad viva y inteligente, capaz de encontrar sus propios caminos hacia la autoorganización y el equilibrio cuando recibe el soporte adecuado.
Esta práctica sutil me ha permitido integrar mi recorrido en una escucha profunda, respetuosa y no invasiva del cuerpo.
Actualmente ofrezco espacios de acompañamiento corporal desde esta mirada integradora, con respeto, presencia y confianza en los recursos naturales propios de cada persona.